Hoy presentamos a una hermana que también lleva muchos años entre nosotros. Se trata de María Argentina de la Cruz Peguero. Nacida en Hato Mayor del Rey, al este de la República Dominicana, llegó a Puerto Rico en el 1988, buscando una mejor calidad de vida. En el 1996, se mudó a Puerto Nuevo. En aquellos momentos, María pasaba por momentos de crisis y depresión. Pero una vecina suya, Myriam Messón, también miembro de nuestra iglesia, la invitó a visitarnos. Recuerda con mucho agradecimiento al pastor Félix Negrón, quien recién había llegado a la iglesia y a Mirta Laureano. Ellos estuvieron orando por ella y dándole apoyo, junto a otros hermanos. Fue así como esta hermana, a quien también conocemos como Argentina (su segundo nombre), escogió la Metropolitana como su iglesia y comenzó a visitarnos junto a sus hijos. Son estos: Gregorio, Fiol (residentes en República Dominicana) y María. Tiene 7 nietos entre las edades de 20 a 45 años.
María se dedica a la cosmetología. Recuerda con mucho cariño, que acostumbraba visitar a nuestra querida dona Carmen Cordero en su hogar, para arreglarle su cabello. Entre sus pasatiempos, María acostumbra visitar enfermos. Hace llamadas a personas en necesidad y ora por ellos. Es muy cooperadora en las actividades que llevamos a cabo, mayormente en la cocina. También le gusta visitar Plaza las Américas para hacer ejercicios con un grupo organizado en esos predios. Pertenece a la Sociedad de Damas y Caballeros. Su versículo favorito se encuentra en Romanos 8:31-32. Agradecemos la dedicación, el compromiso y los esfuerzos que María Argentina hace por su iglesia. Oramos para que Dios le bendiga, le de sabiduría y le supla sus necesidades.

