Lectura día 8: El gran poder amoroso de Jesús [Escrito por Anita Ronda]

13 »En esa visión nocturna, vi que alguien con aspecto humano[a] venía entre las nubes del cielo. Se acercó al venerable Anciano y fue llevado a su presencia, 14 y se le dio autoridad, poder y majestad. ¡Todos los pueblos, naciones y lenguas lo adoraron! ¡Su dominio es un dominio eterno, que no pasará, y su reino jamás será destruido! (Daniel 7: 13-14).

Dios, en su infinita misericordia y gracia, le reveló a Daniel que nos enviaría a Su Hijo.  Le dio dominio, gloria y reino.  Su dominio sería eterno.  ¡Qué hermoso y sobrenatural regalo de nuestro Dios! 

Jesús nos es nacido con su gran Poder Amoroso.  El Hijo de Dios vino a redimirnos de la esclavitud del pecado, para darnos luz y dirigir nuestros pasos por el camino de la paz.  Su nacimiento nos hizo hijos de Dios a todos los que lo recibimos.  Gracias a Jesús tenemos acceso continuo al trono de la gracia y a la presencia de Dios para relacionarnos con ÉL directamente.

¡Qué poder amoroso el de nuestro Señor Jesús!

Su muerte redentora en la cruz, que de mencionarla y meditar en ella me provoca llanto; y el Espíritu Santo, que nos prometió que vendría, son evidencia clara de su poderoso amor, tan grande y sobrenatural que me redarguye.

El gran poder amoroso de Jesús es el mayor REGALO que he recibido en mi vida.

Así dice el Salmo 63: versos 2-4

“Quiero verte en Tu santuario y contemplar Tu poder y tu gloria pues Tu amor vale más que la vida!  Con mis labios te alabare.  Toda mi vida te bendeciré, y a ti levantare mis manos en oración.”

¡Amemos al Señor Jesús!  Vivamos la Navidad!

 

Anita Ronda